Page 352 - PRIMERAS PAGS CAMINO SERVIDUMBRE.qxp
P. 352
APÉNDICE: DOCUMENTOS RELACIONADOS
Por las fechas en que se firmó el contrato para los derechos estadouniden-
ses —a comienzos de abril— empezamos a oír algo sobre el libro en Inglaterra,
que había sido publicado aquí el 10 de marzo.La primera edición en Inglaterra
fue de sólo 2.000 ejemplares, pero se agotó en un mes aproximadamente. Y
comenzó a ser citado en el Parlamento y en los diarios, y unos cuantos perió-
dicos de aquí comenzaron a mencionarlo de vez en cuando;pero,naturalmente,
seguíamos dudosos sobre si habría tenido acogida en Estados Unidos. Es un
hecho que hasta la fecha de publicación no pudimos hallar ninguna librería,
ni siquiera en Nueva York, que se mostrase interesada por el libro, aunque
Joe Margolies, de Brentano, le garantizaba algunas posibilidades.
Ya en junio, el autor corregía nuestras pruebas, y la publicación, que ha-
bíamos esperado que fuese en julio, se retrasó hasta el 18 de septiembre, y
por entonces la edición inglesa estaba por la tercera reimpresión. Nosotros
mandamos más ejemplares prepublicación y para reseñas de lo habitual, y
por las respuestas supimos que el libro tenía buenas posibilidades de captar
el interés: la primera reseña que vimos fue la de Orville Prescott, en el New
York Times del 20 de septiembre, que era neutral y que calificó al libro como
«este triste e irritado librito», pero para cuando habíamos visto la reseña de
primera página de Henry Hazlitt en el Times Book Review del domingo,
habíamos encargado una segunda reimpresión de 5.000 ejemplares.En pocos
días tuvimos peticiones de derechos de edición en alemán,español,holandés
y otras, y el 27 de septiembre encargamos una tercera reimpresión de 5.000
ejemplares, y subimos hasta las 10.000 al día siguiente. De varias partes nos
llegaron peticiones de derechos para revistas,pero la primera fue del Reader’s
Digest que hizo la mejor oferta.
En la primera semana de octubre muchas tiendas agotaron las existen-
cias y tuvimos que hacer un tremendo y complicado trabajo de impresión,
encuadernción, envío y distribución a las tiendas en este país y en Canadá
—por estas fechas habíamos llegado a un arreglo con Routledge para que
se ocupase también de los pedidos de Canadá—.Ya desde un comienzo hubo
gran entusiasmo por el libro pero las ventas subieron y bajaron y a nues-
tra agencia de anuncios le dio un verdadero dolor de cabeza buscando espa-
cio para los momentos adecuados. Unos pocos programas de radio dieron
un empujón al libro, a fines de octubre, pero sabíamos que las ventas baja-
rían después de Navidad, por lo que comenzamos a buscar algo que hacer
351