Page 398 - Drácula
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Drácula de Bram Stoker
no hubiera noticia alguna del barco, para que pudiera estar se
guro de que montaban la guardia realmente al otro lado de la
líneatelegráfica.
Cenamos y nos acostamos temprano. Mañana iremos a
ver al vicecónsul, para llegar a un acuerdo, si es posible, con el
fin de subir a bordo del barco en cuanto llegue al muelle. Van
Helsing dice que nuestra mejor oportunidad consiste en llegar al
barco entre el amanecer y la puesta del sol. El conde, aunque
tome la forma de murciélago, no puede cruzar el agua por su
propia voluntad y, por consiguiente, no puede abandonar el bar
co. Como no puede adoptar la forma humana sin levantar sos
pechas, lo cual no debe ir muy de acuerdo con sus deseos, per
manecerá encerrado en la caja. Si podemos entonces subir a
bordo después de la salida del sol, estará completamente a
nuestra merced, puesto que podremos abrir la caja y asegurar
nos de él, como lo hicimos con la pobre Lucy, antes de que des
pierte. La piedad que pueda despertar en algunos de nosotros o
en todos, no debe tomarse en cuenta. No creemos que vayamos
a tener muchas dificultades con los funcionarios públicos o los
marinos. ¡Gracias a Dios! Este es un país en el que es posible
utilizar el soborno y todos nosotros disponemos de dinero en
abundancia. Solamente debemos ver que el barco no pueda
entrar en el puerto entre la puesta del sol y el amanecer, sin que
nos adviertan de ello y, así, estaremos sobre seguro. El juez
Bolsa de Dinero resolverá este caso, creo yo.
16 de octubre. El informe de Mina sigue siendo el mis
mo: choques de las olas y ruidos del agua, oscuridad y vientos
favorables. Evidentemente, estamos a tiempo, y para cuando
llegue el Czarina Catherine, estaremos preparados. Como debe
pasar por el estrecho de los Dardanelos, estamos seguros de
recibir entonces algún informe.
17 de octubre. Todo está dispuesto ya, creo yo, para re
cibir al conde al regreso de su viaje. Godalming les dijo a los
estibadores que creía que la caja contenía probablemente algo
que le habían robado a un amigo suyo y obtuvo el consentimien
to para abrirla, bajo su propia responsabilidad. El armador le dio
un papel en el que indicaba al capitán que le diera todas las
facilidades para hacer lo que quisiera a bordo del navío, y, asi
mismo, una autorización similar, destinada a su agente en Var
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