Page 186 - Mitos y cuentos egipcios de la época faraónica (ed. Gustave Lefebvre)
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LAS AVENTURAS DE HORUS Y SETH                           l<)5


    con violencia diciendo: «¿Va a entregarse la función a mi hermano menor
    siendo así que yo, que soy su hermano mayor, estoy aquí (vivo)?». E hizo
    un juramento, diciendo: «Se arrebatará la corona blanca de la cabeza de
    Horus, hijo de Isis, y (a él), se le arrojará al agua, para que yo pueda dis­
    putar (todavía)  con él por la función de rey». Y Pra-Harakhti estuvo de
    acuerdo64.

    Escenas de magia

       Entonces  Seth  le  dijo  a  Horus:  «Ven,  transformémonos  en  dos  hi­
    popótamos y lancémonos a /[8,10] las olas en medio de la Muy Verde. Y
    aquél que emerja en un período de tres  meses  completos65, a éste no le
    será atribuida la función». Y se sumergieron los dos adversarios.
       Entonces Isis  se sentó llorando y dijo: «Seth mata a mi hijo Horus».
    Después ella se marchó a buscar una bola (?) de hilo e hizo (con ella) una
    cuerda; incorporó enseguida un deberé16 de oro, que ella  fundió como un
    arma  marina:  le ató la cuerda y lo lanzó al agua67,  en  el lugar en que  se
    habían zambullido Horus y Seth. /[9,1] Pero el arpón mordió68 en el cuer­
    po69 de su hijo Horus, y Horus lanzó un gran grito, diciendo: «¡Socorro70,
    madre (mía) Isis! Ordena a tu arpón desprenderse de mí. Yo soy Horus, el
    hijo  de  Isis».  Entonces  Isis  lanzó  un  gran  grito  y  dijo  a  su  arpón.
    «Despréndete de él. Mira, es mi hijo Horus, es mi niño». Y el arpón se des­
    prendió  de  él.  Entonces  ella  lo  lanzó  de nuevo  al  agua, y mordió  en  el
    cuerpo de Seth. Entonces Seth lanzó un gran grito, diciendo: «¿Qué es lo
    que  te he hecho,  Isis, hermana  mía?  Ordena  /[9,5]  a  tu arpón despren­
    derse de mí. Yo soy tu hermano uterino, Isis». Entonces ella concibió una
    compasión extrema por él. Y Seth la interpeló diciendo: «¿Prefieres antes
    al extranjero que a (tu) hermano uterino Seth?71». Entonces Isis se dirigió
    a su arpón diciendo: «Despréndete de él. Mira, es el hermano uterino de
    Isis aquél a quien muerdes». Y el arpón se desprendió de él.


       64   Lit. «actuar en consecuencia (m-mítt)». Pre-Harakhtí, que siempre fue partidario de Seth,
    se retracta pues de su decisión y da su consentimiento a la continuación de la lucha entre los dos
    adversarios.
       ;
       6>Lit. «tres meses de días». Cfr. p. 134, nota 16.

       66 El deben es una medida de peso que hacia la dinastía XVIII equivalía a 91  gramos.
       67 Sobre la forma de cazar al hipopótamo, cfr. Davies y Gardiner, The Tomb o f Amenemheí, p. 28.
        Lit. «el cobre  (bit) degustó  (dp)»·  La palabra «cobre» designa  aquí al metal no ya como
    lingote, sino  fundido por Isis  en  forma de «arma marina», lo que  nosotros llamamos, en  todo
    este pasaje, «arpón».
       69 Se trata de la palabra hm la que aquí traducimos por «cuerpo» (y no por «Majestad»); igual en
    1. 9,4 y  13,10. Sobre esta acepción de hm, vease el artículo de j. Spiegel en ZAS 75 (1939), p. 112.
       0 Lit. «Ven a mí». La misma expresión en 1.  11,5.

        1En lugar de «el extranjero» p? s drdr, debía estar ahí, en la redacción original, drdr, a juz­
    gar por Sallkr IV, 3,2; la frase de nuestro texto debía ser sustituida por esta otra: «¿Deseas la ene­
    mistad contra (tu) hermano uterino Seth?».
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