Page 49 - Mitos y cuentos egipcios de la época faraónica (ed. Gustave Lefebvre)
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HISTORIA DE SINUHÉ 51
Otorga el aliento a aquél que se ahoga118 y concédenos nuestra hermosa
recompensa en (la persona de) este jeque, hijo de Mehyt119, (de este) Bár
baro nacido en Egipto. Si emprendió la huida, fue por temor a ti; si aban
donó el país, fue por miedo a ti. No más angustia para aquél que ha vis
to tu rostro; el ojo que te ha contemplado no tendrá más miedo».
Entonces dijo su Majestad: «No debe tener miedo, / [B,280] no debe ex-
penmentar(P) temor. Será un Amigo entre los nobles; será colocado en medio
de los cortesanos. Id, vosotros, al pabellón de la mañana120 para servirle».
Sinuhé se instala en Egipto y aguarda la muerte
Salí del pabellón, y los hijos reales me tenían de la mano, /[B,285]
marchamos enseguida hacia la Doble Gran Puerta. Fui instalado en la
mansión de un hijo real, que contenía riquezas. Allí había una sala fres
ca121, e imágenes divinas del horizonte122. También había allí cosas pre
ciosas pertenecientes al tesoro. En cada habitación había vestidos de lino
real, así como olíbano'2' y aceite fino del rey y de los nobles a quienes
ama./[B,290] Y todos los criados se afanaban en sus tareas.
Se hizo desaparecer de mi cuerpo (la señal) de los años depilándo
me124; me peinaron los cabellos, la miseria fue abandonada al desierto y
los vestidos (groseros) a los Corredores de las Arenas. Vestido a partir de
entonces con bellos tejidos de lino, ungido con aceite fino y durmiendo
en un lecho, dejé la arena a aquellos que allí viven /[B,295] y el aceite de
madera125 a quien se frota con él.
118 A Sinuhé, a quien la angustia sofoca.
I,y «Hijo de Mehvt»: Mehyt, diosa leontocéfala de This; ;o será quizás, como se pregunta
Sethe, Erläuterungen, p. 19 (S. 15,19), el nombre de la madre de Sinuhé? No parece en todo caso
que haya aquí, como se creyó, un juego de palabras con el nombre de Sinuhé («hijo del sicó
moro» si nht).
12n La expresión ehn w tí d w it parece ser una variante de p r d w it «la casa de la mañana»,
donde el rey realizaba sus abluciones y se adornaba. Estaba necesariamente en el interior del pa
lacio, más allá de la Doble Gran Puerta.
121 En la «sala fresca» se conservaban los alimentos ν sobre todo el agua al abrigo del calor
y de las moscas.
122 Imágenes pintadas en las paredes de las habitaciones.
121 Se trata posiblemente de un ungüento extraído del anti (entyw), o de una solución acuo
sa de esta goma-resina, de la que se servían para dar brillo a los tintes. La palabra cntyw , que
con mucha frecuencia se traduce por «mirra», designa en realidad una especie de incienso lla
mado «olíbano», como lo demostró, hace ya sus buenos cuarenta años, Lieblein, en sus Recher
ches sur l'histoire et hi civilisation de ¡ ’Ancienne Egypte, pp. 220-227. Los árboles que producían el olí
bano eran numerosos en el país del Punt y regiones vecinas, al sur del mar Rojo. Si tal es la
significación de cntyw> recordemos aquí que la palabra sntr designa la «resina de terebinto», de
la cual se hacía gran uso para los inciensos rituales: cfr. Y. Loret, en Kewi 3 (1930), p. 23.
124 Lit. «se hizo que pasaran los años sobre mi cuerpo, que fue depilado (o rasurado)»;
ti.kwiy seudoparticipio de un verbo ti> por otra parte desconocido.
12:1 Se trata del aceite de oliva, en oposición al aceite de ricino, del que hacían buen uso los
egipcios.