Page 41 - Esquilo - Πέρσαι ♦ Los persas
P. 41
ΧΟ. πῶς εἶπας; οὐ γὰρ πᾶν στράτευμα βαρβάρων CORIFEO. — ¿Cómo has dicho? ¿Que no va a
περᾷ τὸν Ἕλλης πορθμὸν Εὐρώπης ἄπο; cruzar el estrecho de Hele, regresando de Europa
todo el ejército persa?
ΔΑ. παῦροί γε πολλῶν, εἴ τι πιστεῦσαι θεῶν 800 SOMBRA. 800 — Pocos, ciertamente, de los
χρὴ θεσφάτοισιν, ἐς τὰ νῦν πεπραγμένα muchos que son, si hay que dar algún crédito a los
βλέψαντα· συμβαίνει γὰρ οὐ τὰ μέν, τὰ δ’ οὔ. oráculos de los dioses, a la vista de lo que ahora ha
κεἴπερ τάδ’ ἐστί, πλῆθος ἔκκριτον στρατοῦ ocurrido, pues no suceden unos sí y otros no. Y,
λείπει κεναῖσιν ἐλπίσιν πεπεισμένος. siendo esto así, deja Jerjes allí una tropa escogida
del ejército, por dejarse llevar de esperanzas vacías.
μίμνουσι δ’ ἔνθα πεδίον Ἀσωπὸς ῥοαῖς 805
ἄρδει, φίλον πίασμα Βοιωτῶν χθονί· 805 Permanecen allí donde riega el llano con sus
οὗ σφιν κακῶν ὕψιστ’ ἐπαμμένει παθεῖν, aguas corrientes el Asopo, fertilizante amado de la
ὕβρεως ἄποινα κἀθέων φρονημάτων· tierra beocia. Allí les espera sufrir las más hondas
οἳ γῆν μολόντες Ἑλλάδ’ οὐ θεῶν βρέτη desgracias en castigo de su soberbia y sacrílego
ᾐδοῦντο συλᾶν οὐδὲ πιμπράναι νεώς· 810 orgullo, pues, cuando ellos llegaron a la tierra
βωμοὶ δ’ ἄιστοι, δαιμόνων θ’ ἱδρύματα griega, 810 no sintieron pudor al saquear las
πρόρριζα φύρδην ἐξανέστραπται βάθρων. estatuas sagradas de los dioses ni de incendiar los
τοιγὰρ κακῶς δράσαντες οὐκ ἐλάσσονα templos. Han desaparecido los altares de dioses, y
πάσχουσι, τὰ δὲ μέλλουσι, κοὐδέπω κακῶν las estatuas de las deidades han sido arrancadas de
κρηπὶς ὕπεστιν, ἀλλ’ ἔτ’ ἐκπιδύεται. 815 raíz de sus basas y, en confusión, puestas cabeza
τόσος γὰρ ἔσται πέλανος αἱματοσφαγὴς abajo. Así que, como ellos obraron el mal, están
πρὸς γῇ Πλαταιῶν Δωρίδος λόγχης ὕπο· padeciendo desgracias no menores 815 y otras que
les esperan, porque aún carecen de fondo sus
males, pues todavía †se está formando†. ¡Tal será
la ofrenda de sangre vertida con la degollina en
θῖνες νεκρῶν δὲ καὶ τριτοσπόρῳ γονῇ tierra de Platea por la lanza doria!
ἄφωνα σημανοῦσιν ὄμμασιν βροτῶν Montones de cadáveres, hasta la tercera
ὡς οὐχ ὑπέρφευ θνητὸν ὄντα χρὴ φρονεῖν. 820 generación, indicarán sin palabras a los ojos de los
ὕβρις γὰρ ἐξανθοῦσ’ ἐκάρπωσεν στάχυν mortales 820 que cuando se es mortal no hay que
ἄτης, ὅθεν πάγκλαυτον ἐξαμᾷ θέρος. abrigar pensamientos más allá de la propia medida
[ ] . Cuando la soberbia florece, da como fruto el
80
racimo de la pérdida del propio dominio y
recolecta cosecha de lágrimas.
τοιαῦθ’ ὁρῶντες τῶνδε τἀπιτίμια Fijaos en los castigos de estos hechos y acordaos de
μέμνησθ’ Ἀθηνῶν Ἑλλάδος τε, μηδέ τις Atenas y Grecia [ ] .
81
ὑπερφρονήσας τὸν παρόντα δαίμονα 825
ἄλλων ἐρασθεὶς ὄλβον ἐκχέῃ μέγαν. Que nadie, 825 por haber despreciado la suerte
favorable que tiene llevado del deseo de otros
Ζεύς τοι κολαστὴς τῶν ὑπερκόμπων ἄγαν
φρονημάτων ἔπεστιν, εὔθυνος βαρύς. bienes, vaya a perder del todo una considerable
prosperidad. Arriba está Zeus, juez riguroso, que
82
castiga los pensamientos demasiado soberbios [ ]
830.
80 Esquilo pone en boca de Darío el consejo délfico de ajustar la conducta a la propia limitación. No tenerlo en cuenta ha
llevado a Jerjes al desastre.
81 Darío dice aquí estas palabras con un sentido muy distinto del que relata HERÓDOTO (V 105). Cuenta el historiador que,
al enterarse Darío de que los atenienses habían tomado parte en el incendio de Sardes, disparó hacia el cielo una flecha
impetrando de Zeus que le fuera dado vengarse de ellos y que, a continuación, ordenó a uno de sus servidores que, al
servirle la comida, le dijera siempre tres veces: «Señor, acuérdate de los atenienses».
82 Cf. SOLÓN, Elegía a las Musas