Page 127 - El arte japonés de la guerra : entendiendo la sabiduría de la estrategia

ESTRATAGEMAS DEL SAMURAY 123

A la inversa, la primera línea de la estrategia ofensiva de
Yagyu es también defensiva, dirigida a anular la capacidad
de que sus contrincantes puedan leer su propia mente
como él lee la de ellos. Como en cualquier juego de presti-
digitación, la distracción se convierte en una clave, tanto
para el ataque defensivo como para la defensa ofensiva.
Yagyu recurre de nuevo a la terminología zen para encon-
trar una metáfora apropiada.

Existe en el zen lo que se llama «golpear la hierba para
asustar a las serpientes». Para amedrentar o sorprender
basta con poco como estratagema, lo mismo que golpear a
las serpientes en la hierba para asustarías.
Hacer algo inesperado como argucia para intimidar al
contrincante, también es una apariencia que oculta una
intención posterior; es un arte de la guerra.
Cuando el adversario está asustado y se ha logrado dis-
traer su sentimiento de oposición, sufrirá un desfase de
reacción en el tiempo.
Incluso simples gestos ordinarios se utilizan para dis-
traer la atención del adversario.
Arrojar al suelo la propia espada también es un arte de ..
la guerra. La espada del adversario es tu espada. Eso es
actuar en la vanguardia del momento.

Esta clase de estrategia se emplea normalmente en todo
tipo de interacciones en Japón, y también en todo Oriente.
En su origen estaba basada en antiguas enseñanzas taoístas
y budistas como una estratagema educativa, y fue adaptada
al arte de la ventaja en el clásico libro de estrategia conoci-
do como El arte de la guerra. Ahora, ésta se encuentra
ampliamente difundida y puede aparecer en cualquier tipo
de transacción.