Page 53 - El arte japonés de la guerra : entendiendo la sabiduría de la estrategia

EL BUSHIDO Y LAS ARTES MARCIALES 49

Como el maestro carpintero es el organizador y direc-
tor absoluto de los oficiales, es su obligación comprender
el sistema de medidas, mantener exactas las medidas loca-
les y atender a las de su propio establecimiento.
El maestro carpintero, sabiendo cómo construir todo
tipo de estructuras, emplea a la gente para levantar casas.
A este respecto él es lo mismo que el maestro guerrero.
Cuando escoge la madera para construir una casa, los
troncos que parecen buenos, los que están rectos y sin
nudos, son utilizados para los pilares frontales; los que tie-
nen nudos, pero son rectos, son utilizados como pilares
posteriores; los que son débiles, pero no tienen nudos y
parecen buenos, sirven como marcos, y los troncos que son
torcidos y mudosos, pero fuertes, son utilizados inteli-
gentemente considerando las diversas partes de la casa, y así
ésta durará largo tiempo. Incluso los troncos nudosos,
retorcidos y débiles pueden usarse como andamios, y des-
pués como leña.
Como el maestro carpintero dirige a los oficiales,
conoce sus varios niveles de capacidad y les da las tareas
apropiadas. Incluso a los inexpertos y a los torpes puede
dárseles tareas conforme a sus posibilidades. Si el maestro
carpintero ejerce el discernimiento en la asignación de las--
labores, el trabajo progresará sin problemas. La eficacia y el
progreso sin contratiempos, la prudencia en todos los
asuntos, el conocimiento de la dinámica completa y de los
diferentes niveles de energía y temperamentos, la inspira-
ción de confianza, el saber lo que no es posible, todo ello
son asuntos que deben estar en la mente del maestro car-
pintero. Lo mismo es para las artes marciales.

El libro clásico taoísta Huamanzi habla de la igualdad
social en términos de pleno empleo de acuerdo con las
capacidades individuales. Bajo la dirección de los sabios,