Page 59 - El arte japonés de la guerra : entendiendo la sabiduría de la estrategia
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EL BUSHIDO  Y LAS  ARTES  MARCIALES   55

    maestro  zen  de la dinastía  china  Sung decía:  «Los  que  no
    poseen  una  virtud  real en  su  interior,  sino que se  apoyan  en
    una  inteligencia  florida  externa,  son  como  barcas  agujerea-
    das pintadas de colores  brillantes;  si se pone  maniquíes  den-
    tro y se  las coloca  en  tierra  firme, todo parece  normal,  pero
    una  vez  en  los ríos y en  los lagos, en  medio  del viento  y de
    las olas, ¿no se  hallan  acaso  en  peligro?
       La  práctica  de  «esconder  la propia  luz»  para  parecer
    personas  ordinarias  ante  los  demás,  se  llevaba  a  cabo  de
    manera  deliberada  entre  los  antiguos  místicos  taoístas  y
    budistas  después  de haber  alcanzado  la iluminación,  en  la
    creencia  de que así podían conseguir niveles  más sutiles  que
    si se  dejaban  admirar  por sus  conocimientos.  Era  ésta  una
    forma  más  elevada  de  modestia  que  la prescrita  para  los
    estudiantes;  se  consideraba  que  la compulsión  de ostenta-
    ción  destruía  inevitablemente  sus  posibilidades  de ilumina-
    ción.  Fushan,  uno  de los  grandes  maestros  zen  de  China,
    decía:  «Los  que hacen  alarde  de su  aprendizaje  y recurren  a
    la palabra,  sin  haber  siquiera  aprendido  realmente  a alcan-
    zar  la vía, utilizando  la elocuencia  y una  lengua afilada  para
    obtener  victorias,  son  como  fachadas  pintadas  de  berme-
    llón.  El bermellón  sólo aumenta  el olor.»
       En su propio libro sobre tradiciones  familiares, Yagyu se
    concentra  en  las  enseñanzas  del  maestro  zen  Takuan
    ampliándolas.
             Se vuelve  más  fácil  hacer  cualquier  cosa  cuando  llegas
         a no  tener  nada  en  tu  mente.  Por  esta  razón,  el objeto  del
         estudio  de todas las artes  zen  es el de limpiar lo que hay en
         tu  mente.  Al principio  no  sabes  nada;  apenas  tienes  siquie-
         ra  preguntas  en  tu  mente.  Después,  cuando  empiezas  a
         estudiar,  hay algo en  ella que  te  bloquea,  y hace  que  todo
         sea  difícil.
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