Page 78 - El arte japonés de la guerra : entendiendo la sabiduría de la estrategia
P. 78
74 EL ARTE JAPONÉS DE LA GUERRA
que el cambio interior sea efectivo, las disciplinas externas
pueden tener una influencia contraproducente en el «yo» y
suscitar cualidades tan peligrosas como la arrogancia y la
insensibilidad.
Uno de los primeros y principales principios zen de
aprendizaje se resume en el proverbio: «Mirando la luna en
el cielo, pierdes la perla que está en tus manos.» Un pro-
verbio chino también dice: «Si te apresuras mucho, nunca
llegarás.» El maestro zen japonés de los primeros tiempos,
Dogen, uno de los pioneros durante mucho tiempo olvi-
dado por los textos zen japoneses, y uno de los inspirado-
res principales de Suzuki Shosan, expresaba esto en un
poema:
Cava el estanque
sin esperar a la luna.
Cuando aquél esté acabado,
la luna llegará por sí misma.
Shosan siguió muchas de las enseñanzas de Dogen, y
también afirmó que el budismo podía ser practicado en
cualquier momento sin tener que limitarse por remotas
- aspiraciones.
La gente piensa que el budismo es inútil si uno no se
ilumina. Esto no es correcto. Budismo significa utilizar
bien la mente en el presente, así que tiene una utilidad
inmediata. La práctica budista consiste en emplear la mente
tanto como sea posible. A medida que ésta se fortalece, se
hace cada vez más eficaz.
Más adelante, Shosan insistía en los efectos negativos de
la exageración y de la impaciencia, tanto en la persecución