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I ll GUERRA CIVIL
quio y en Farsalia. Muerto Pompeyo, pasó al África con Catón;
después de Tapso se trasladó a España, participando, con vivo
entusiasmo, en la batalla de Munda, en donde encontró la muerte.
4 Como tránsfuga del partido cesariano, Labieno considera ne
cesario ser el primero en adoptar una posición enérgica en este
momento tan delicado, y dar ejemplo, como se dice inmediata
mente, de serenidad, ante la catástrofe de las deserciones en masa.
5 En vista de que Pompeyo había llegado a tiempo a las inme
diaciones de Dirraquio, César considera prudente no forzar las
circunstancias, ni precipitarse, y por ello se detiene a la espera
del desarrollo ulterior de los acontecimientos.
6Apso: río de la Iliria, hoy río Semeni, que desemboca en el
Adriático entre Apolonia y el río Genusus. Pompeyo y César
acamparon frente a frente, en ambas orillas.
7 Se refiere a Orico, Apolonia, Amantia, Byllis y otras locali
dades que lo reciben con entusiasmo.
8 César había desembarcado en Iliria con sólo siete legiones de
las que tenía a su disposición; en el mes de marzo, Antonio le
llevará otras cuatro; en conjunto, serían unos sesenta y seis mil
legionarios, más la caballería y las tropas auxiliares.
9 Aunque al pie de la letra se traduce tiendas, la expresión no
es absolutamente exacta, pues en invierno los soldados se acanto
naban en edificios construidos por ellos o proporcionados por los
lugareños, para refugiarse de los rigores del tiempo.
XIV
1 Caleno: cf. Guerra Civil, lib. tere., vm, 1.
2 En la alusión de César a este episodio es evidente la voluntad
de separar la responsabilidad de Caleno de la del comandante del
barco particular, con el objeto de que su pérdida no pese en sen
tido negativo sobre el comportamiento de las tropas cesarianas.
3 El autor pone de relieve la crueldad de la represalia, dejando
imaginar lo que hubiera sido del ejército entero si llega a caer
en manos del enemigo.
4 Nótese cómo en el episodio predomina nuevamente el con
cepto de la Fortuna Caesaris; en cuanto al desastre del ejército,
hubiera sido total, no sólo de la parte que venía en las naves,
sino también de la parte que ya había desembarcado y que hu
biera quedado sin esperanza de refuerzos.
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