Page 686 - Guerra de las Galias [Colección Gredos Bilingüe] I-II-III
P. 686

se,  maiorem Galliae motum exspectans,  ne  ab omnibus
         civitatibus circumsisteretur, consilia inibat quemadmo­
         dum a Gergovia discederet ac rursus omnem exercitum
         contraheret, ne profectio, nata ab timore defectionis, si­
         milis  fugae  videretur.

            XLIV.  (1)  Haec cogitanti  accidere  visa  est  facultas
         bene  rei  gerendae.  Nam,  cum in  minora castra*  operis
         perspiciendi causa venisset, animadvertit collem qui ab
         hostibus  tenebatur,  nudatum hominibus,  qui superiori­
         bus diebus vix prae multitudine cerni poterat. (2) Admi­
         ratus,  quaerit ex  perfugis  causam,  quorum  magnus  ad
         eum cotidie numerus confluebat. (3) Constabat inter om­
         nes, quod iam ipse Caesar per exploratores* cognoverat:
         dorsum  esse  eius  iugi  prope  aequum,  sed  hunc  silves­
         trem  et  angustum  qua  esset  aditus  ad  alteram  partem
         oppidi*;  (4)  vehementer  huic  illos  loco  timere  nec  iam
         aliter  sentire,  uno  colle  ab  Romanis  occupato,  si  alte­
         rum  amisissent,  quin  paene  circumvallati  atque  omni




         do mayores  sublevaciones de  la Galia,  para no verse cercado por todos  los
         pueblos, andaba deliberando cómo retirarse de Gergovia y  reunir de nuevo
          todo el ejército, evitando que su marcha, ocasionada por el miedo a la rebe­
          lión,  se  pareciera  a  una  huida.

            XLIV.  (1) Mientras pensaba esto,  se le presentó una ocasión que le pa­
          reció  favorable.  Pues,  habiendo  ido  al  campamento  menor para  examinar
          las obras, vió desprovista de defensores una colina que ocupaba el enemigo,
          la  cual  en  los  días  anteriores  apenas  se  veía  por  la  muchedumbre  que  la
          cubría. (2) Extrañado, pregunta el motivo a los desertores, que en gran nú­
          mero  se pasaban  a  él  diariamente.  (3)  Todos  convenían  en  afirmar  lo  que
          ya el mismo César había sabido por los exploradores: que la cima de aque­
          lla colina era casi llana,  pero intrincada y estrecha por donde comunicaba
          con el otro lado de la ciudad;  (4) que los enemigos temían  mucho por esta
          posición, y estaban persuadidos de que,  ocupada ya una colina por los  ro­
          manos,  si  perdían  la  otra,  quedarían,  por  decirlo  así,  casi  cercados  y  sin
                                  100
   681   682   683   684   685   686   687   688   689   690   691