Page 240 - La Constitución de los atenienses
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LA CONSTITUCIÓN DE LOS ATENIENSES



                       En  resumen,  el  pasaje  comentado  no  alude  a  ningún  decreto

                   específico  donde  se  prohibiera  atacar  al  demos,  de  modo  que  no

                   puede  tomarse  la prohibición mencionada por el Anónimo  como
                   terminus  para  ubicar  cronológicamente  la  obra.  El  autor  observa

                   cómo la actitud del demos es del todo comprensible, y desde nues­

                   tro  punto de  vista,  tiene los mismos propósitos  que el  proceso  de

                   ostracismo:  fortalecer  los  órganos  democráticos  suprimiendo  el

                   poder personal de  los  dirigentes  populares  demasiado  poderosos.

                   Se puede observar que,  aun cuando el demos aparece representado
                   de manera grotesca, en la escena final Aristófanes se corrige y hace

                   olvidar  las  demás  escenas  donde  se  ridiculiza al  personaje,  al  pre­

                   sentar  a  un  Demos  rejuvenecido,  consciente  y  razonable,  listo

                   para  volver  a  desarrollar  sus  actividades  habituales  (Leduc  1976:

                   216).

                       20     el actuar en beneficio propio es del todojustificable:  En  la men­

                   talidad griega común y corriente,  el sentido de la conveniencia (to
                   σύμφεpov)  era  un  criterio  central  en  la toma de decisiones  políti­

                   cas,  de manera  que  los actos que un  ciudadano  o  una comunidad

                   realizaba  en  su  propio  beneficio  resultaban justificables.  No  exis­

                   te,  empero,  una clara correspondencia semántica con  lo que sigue

                   (se  esperaría  algo  como  “pero  no  es justificable”);  existe,  de  cual­

                   quier modo,  una cierta correspondencia  (por una parte, el pueblo;

                   por  otra,  el  mal oligarca).

                       quien,  sin pertenecer al pueblo, prefirió hacer política en  una ciu­

                   dad democrática: La  mayoría  de  los  estudiosos ha  pensado  que  el
                  Anónimo  se  refería  a  una  persona  en  especial,  que  podía  ser

                   Pericles,  Cleón o Alcibíades,  aunque Fontana (1968:  29)  pensaba

                   que  “el  autor  alude a  todos y a  ninguno  en  particular”.  Con  base

                   en  Plutarco  (Pericles 7),  Instinsky  (1933:  34-5)  creía  que  el  Anó-



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