Page 132 - MITOS GRIEGOS e historiografía antigua
P. 132

144                                                S. P erea Y ébenes

     en uno posterior inmediato, como si el transcurrir del tiempo absoluto
     hubiera avanzado un poco.108
        Para Tucídides el motus que provoca los cambios es la guerra. Se
     suponía que el cometido de la historia era conservar, elaborándola, la
     memoria pasada de los hombres para un futuro que también les atañía
     a ellos. En Tucídides la intervención divina en los actos humanos no es
     necesaria ni evidente, y es a partir de él cuando se inicia una etapa que
     durará varios siglos en que la narrativa histórica estará marcada por la
     falta de interés acerca de la especulación teológica.
        La obra de Tucídides, con un objeto totalmente político, no fue, en
     mi opinión, reflejo de ninguna ideología, ni su historia tiene una inci­
     dencia apreciable en la política imperialista ateniense109 ni en la socie­
     dad; acaso encierre la lección de formar a un buen político, pero más
     desde el espíritu del sofista que con la pretensión didáctica de una vo­
     luntad del poder. Momigliano recuerda que muchos historiadores es­
     criben su obra lejos de sus patrias originarias, desterrados voluntaria o
     forzosamente (Heródoto,  Tucídides, Jenofonte,  Ctesias, Teopompo,
     Filisto, Timeo, Polibio, Posidonio, etc.), y que esta historiografía tuvo
     una posición ambigua en la sociedad griega.110
        El historiador (griego) por lo general actuaba de forma aislada, y no
     esperaba favores de los Estados. No hablaba, por tanto, por cuenta de
     las instituciones de las que no recibía apoyo, ni, por supuesto, premios.
     Calístenes, el historiador-confidente de Alejandro Magno, encontró
     como recompensa la muerte. La indiferencia institucional hacia los


      108 A. Leski, Historia de la literatura griega, Madrid 1976, 512, n. 377; N.G.L. Hammond,
        «The Arrangement of Thought in the Proem and in other Parts of Thucydides», Class.
        Quart., 46,  1952,  127.
      109 J. Romilly, Thucydides et l ’impérialisme Athénien, Paris 19512; Ead., «L’utilité de l’histoire
        selon Thucydides», Entretiens sur l'Antiquité Classique, 4 1956, 39 ss.; H. Strasburger,
        «Die Entdeckung der politischen Geschichte durch Thucydides», Saeculum, 5,1954,395,
        ss.; Id., «Thucydides und die politische Selbsdarstellung der Athener», Hermes, 86,1958,
        17 ss. Sobre aspectos sociales de la Guerra del Peloponeso y sus orígenes véase, G.E.M. de
        Ste. Croix,  The origins of the Peloponesian  War, London  1972.  Sobre el pensamiento
        historiográfico de Tucídides, A. Momigliano, «La composizione della storia di Tucidide»,
        Mem. Accad. Scienze Tonino, 67,  1930, 1-48; S. Mazzarino, IIpensiero storico classico,
        Bari 1966-67,1-III; F.E. Adcok, Thucydides and his history, Cambridge 1963; L. Gemet,
        Thucydides and his Age, I-II, Oxford 1948; A.W. Gomme, A historical Commentary on
        Thucydides,  5 vols., Oxford  1945; y O. Luchnat,  Thucydides der Historiker,  Stuttgart
        1971.
      110 A. Momigliano, «Historiografía griega», en LHG, 1984,20-21.
   127   128   129   130   131   132   133   134   135   136   137