Page 144 - MITOS GRIEGOS e historiografía antigua
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     de alguna participa en otra (o en otras o en todas) pero con distinta
     duración e intensidad, y ésa a su vez en otra, aunque no en la línea
     causa-efecto del tiempo absoluto, puramente cronológico, sino un tiempo
     múltiple que discurre por la complejidad de las estructuras. En el fondo
     de toda conclusión dialéctica subyace el  axioma einsteniano  de  la
     relatividad y  la provisionalidad.161  La lejanía temporal  del  objeto
     (historiografía antigua), la falta de obras históricas que sin duda fueron
     muy importantes (Timeo, o Fabio Píctor), unido al componente subje­
     tivo  del  propio  acto volitivo  de narrar y  a la ideología que pudo
     condicionarla, hacen que esa «relatividad» del objeto de estudio sea
     perfectamente entendida. Y hay que añadir la imagen mental asumida
     por la mayoría de que todo objeto abstracto (como puede ser también el
     tiempo) es más fácilmente catalogado como relativo. Quizás por eso
     mismo el propio Momigliano se atreva a sugerir algunas nuevas vías de
     estudio que, comparativa o complementariamente, permitan conocer
     algo mejor esa realidad casi misteriosa que es el tiempo. Respecto a
     éste, Momigliano se queja de la vaga terminología empleada por los
     teólogos y del desconcierto que parece dominarlos,162 y ello tiene mu­
     cho que ver con el apriorismo ideológico con que se acometen estos
     estudios. Los debates en tomo al tiempo y su diferenciación entre la
     concepción judía y griega se resumen en:

         a) Que en el verbo hebreo no existe el futuro, al igual que en todas
     las lenguas semíticas.
        b) Que en hebreo no hay una palabra que designe tiempo.  ¿De las
     premisas a y  b puede deducirse que los semitas tenían una noción de
     tiempo distinta a los indoeuropeos?163
        c) Para los judíos y los primeros cristianos el tiempo es una línea,
     para los griegos es un círculo.164



      161 C.F.S. Cardoso, Introducción,  122-123, y J. Topolsky, op. cit.  180 ss.
      162 A. Momigliano, «El tiempo», 67-71.
      163 Ello no presupone una visión racista del hecho, A. Momigliano, «El tiempo», 67; y N.H.
        Snaith, «Time in the Old Testament», en F.F. Bruce, Promise and Fulfilment, Edinburgh
        1963,  175-186; M. Cohen, Le système verbal sémitique et l ’expression du temps, Paris
        1924, y J.L. MacLennan, El problema del aspecto verbal, Madrid 1962.
      164 Citado por Momigliano, «El tiempo», 70, H.Ch. Puech, «La Gnose et le temps», Eranos-
        Jahrbuch, 20,1951,57-113, y G. Quispel, «Zeit und Geschichte im Antikem Christentum»,
        Ibid,  115-140.
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