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que desembocaron en una abierta oposición de de ser reevaluadas una vez se contara con el
la población local al proyecto, razón por la cual Estudio de Impacto Ambiental".'9
éste nunca pudo llevarse a cabo.
El referido autor explica cómo es que los pobla­
La pregunta que surge es por qué la población se dores deTambogrande se aferraron a una serie
opuso, incluso violentamente, a que Manhattan de heurísticas (reglas prácticas que las personas
Minerals desarrollase un proyecto que supuesta­ tenemos interiorizadas y que usamos para to ­
mente conllevaría amplios beneficios, incluyendo mar decisiones) para fijar su posición frente al
cientos de puestos de trabajo para gente de la proyecto minero. Sucintamente, lo que sucedió
zona. Cabe mencionar también queTambogrande fue lo siguiente20:
es uno de los distritos más pobres del país, por lo
que la llegada de la mina se hubiese traducido en a. La población cayó en un sesgo de disponi­
inversiones para ampliar la cobertura de servicios bilidad, el cual hizo que las personas aso­
básicos e infraestructura, entre otros. ciaran las actividades mineras a los daños
ambientales. La población tenía presentes
Lima Trelles de Belaunde ha estudiado lo ocurrido ejemplos negativos del impacto de la mi­

Facultad de Derecho de la U niversidad de
en Tambogrande desde la perspectiva de la nería, relegando todo ejemplo de convi­
economía conductual y la psicología cognitiva, vencia entre la minería y la agricultura, de
con importantes observaciones'8. La explicación modo que cualquier explicación racional
principal para la reacción de la población es que (como los resultados del EIA) o compromi­
se temía que el proyecto minero generase un so de la empresa caía en oídos sordos. Esto
desastre ambiental irremediable para la agri­ tiene relación con una marcada aversión
cultura y el modo de vida de los pobladores. El al riesgo sustentada en emociones nega­
problema con dicha explicación son las razones tivas hacia la minería y una preferencia
que la fundamentan. por mantener el statu quo, aún cuando la
probabilidad de que se materializaran los
Como indica Trelles: riesgos resultaba sustancialmente menor
a los beneficios esperados.
"La oposición de la población al proyecto
minero era muy fuerte y casi unánime. Debe b. fue que la posición anti-minera radical se
Se produjo un efecto cascada entre la po­
blación deTambogrande, cuyo resultado
notarse, no obstante, que no se encontraba
Revista editada por alum nos de la podía confiaren Manhattan, el gobierno ni el tra Cialdini, por el principio de "prueba
sustentada en argumentos técnicos, sino
expandiera. Cabe añadir que, como mues­
más bien en una creencia monolítica en que
el proyecto minero sería peligroso y que no se
social" (social proof) un sujeto tomará un
comportamiento como correcto cuando
Estudio de Impacto Ambiental. Estas opinio­
observa que otras personas han adoptado
nes fueron formadas y dadas antes de que
dicho comportamiento21, más aún cuando
se finalizara con el Estudio de Impacto Am­
el sujeto considera que dichas personas son
biental y, más aún, cuando eran expresadas
similares a él mismo22.
dejaban en claro que no existía posibilidad

18. TRELLES DE BELAUNDE, J. Oscar. "Una mirada al conflicto minero de Tambogrande bajo una perspectiva de la
130 19. Ibíd., p. 317.
economía conductual y la psicología cognitiva". En:Themis N°55, pp. 309-326.
ADVOCATUS 20. Ibíd., pp. 321-324.

21. CIALDINI, Robert B.Influence. The Psychology of Persuasión.Revised Edition. Nueva York: HarperCollins, 2007, p. 116.
22. Ibíd., p. 142.

3 6 A n t h o n y L a u b B e n a v i d e s / M i g u e l V a l d e r r a m a D e v e s c o v i