Page 106 - Lévêque, Pierre - El mundo helenístico
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     crecer: 200.000 volúmenes a la muerte de Soter, 400.000 a la de Füadel·
     jfo ,  que adquirió importantes fondos, especialmente el de Aristóteles, y
     700.000 cuando íue quemada a raíz de la conquista de César. Además,
     Fiiadelfo  instaló,  en  el  Serapeum,  una  segunda  biblioteca  de  50.000
     obras. Los atálidas rivalhäJtjo con los lágidas y fundarontambién una
     biblioteca, en Pérgamo, de 400,000 volúmenes, más especializada en la
     erudición que en ia literatura.


     Sensibilidad e intelectijaiísmo en las letras

        La literatura se mostró extraordinariamente viva, Es cierto que ios gé­
     neros tradicionales de los siglos clásicos desaparecieron casi por comple­
     to: creadas para instruir y convencer al dem os, la tragedia y la elocuencia
     ya no disponían del marco social necesario. Pero renació la poesía lírica y
     apareció la erudición filológica, mientras que sólo sobrevivieron la come­
     dia y la historia.



     Ei hombre de ieím s y su público

        Las  nuevas  condiciones  del  mundo  helenístico  explican,  al mismo
     tiempo, el auge de la literatura y su tadícal transformación, Entre las más
     importantes está la aparición de un instrumento de expresión y de centros
     literarios que permitían captar en vivo aquella mezcla de unidad y diversi­
     dad que caracterizaba, a la sazón, al helenismo.
        Durante la época clásica^ el dialecto ático había adquirido una inne­
     gable primacía debido al esplendor intelectual de Atenas; Itie ese dialecto
     el que creó la base esencial de la koiné, o lengua común, que se difundió
     desde la época de Alejandro con finalidades esencialmente pragmáticas
     en la cancillería, las relaciones comerciales y el uso corriente. Pero la koi­
     ne enriqueció el dialecto ático con influencias, especialmente del jónico,
     y lo simplificó desde el doble punto de vista morfológico y sintáctico,
     despojándolo de sus matices y finura, pero permitiendo que se convir­
     tiera en una lengua de cultura de gran difusión. No obstante, la práctica
     de la  literatura  siguió siendo un  juego,  como  en la  época anterior, y,
     mientras en prosa se usaba ampliamente la komé, ia poesía se complació
     en cambiar su expresión  recurriendo a los dialectos tradícionalmente.
     vinculados a un género: la lengua homérica —en sí misma un artefacto
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