Page 81 - Lévêque, Pierre - El mundo helenístico
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EL  MUNDO  DE  LA  CONQUISTA:  LA  EXPLOTACIÓN  DE  LOS  REINOS  81


     dos consecuencias propias del uso de la moneda: la banca y el cobro de
     impuestos.13
         Vale la pena entrar brevemente en los detalles para constatar de qué
     modo las soluciones aplicadas por el poder real para controlar la vida agrí­
     cola eran flexibles y variadas.14
        Para el trigo, que era un cultivo básico, el propio rey fijaba la superfi­
     cie a sembrar mediante una relación detallada (diagraphé). Por otra par­
     te, la propia naturaleza de aquel listado real ha provocado polémicas en­
     tre los especialistas: para unos, era una orden que se aplicaba a cuantos
     cultivaban sin reparar en su estatuto, o sea, el instrumento de una econo­
     mía de Estado absoluta; para otros, era un programa de gestión para las
     tierras reales. Sea como fuere, y tras enumerar las obligaciones de cam­
     pesinos y aldeas en materia de siembra, dicho listado era establecido por
     la administración local según el estado de la inundación, y luego promul­
     gado por el dioketes, que se encargaba a partir de entonces de velar por
     su aplicación con el mayor rigor, aunque no siempre con fortuna.
        El rey prestaba semillas a los campesinos,15 lo que representaba para él
     una excelente inversión y le permitía introducir nuevas especies, de las que
     esperaba un mejor rendimiento. Los campos eran vigilados muy de cerca
     por los funcionarios reales hasta la llegada de la siega. La cosecha era com­
     pletamente embargada en garantía de los cánones e impuestos que se de­
     bían al rey en forma de trigo (el más importante de los cuales, el impuesto
     sobre los bienes raíces, era proporcional a la superficie cultivada). Los in­
     tereses de los préstamos de semillas, la recaudación de impuestos y las con­
     tribuciones suponían fácilmente la mitad del producto de la tierra.
        Los beneficios del rey eran enormes. Poseedor de inmensas cantida­
     des de trigo que se amontonaban en los graneros reales, era el dueño del
     campo. Además, disponía de un estimable producto para exportar. Este
     poder absoluto sobre el mercado de cereales se obtenía casi sin recurrir
     al absolutismo.



        13.  El sistema de recaudación de impuestos, que sobrepasaba de largo el ámbito de
     la vida rural, era una garantía que los lágidas creyeron útil instaurar para percibir sus ren­
     tas. Originalmente era un sistema griego, ya que no podía existir en un país de economía
     natural.
        14.  Esencialmente, el sistema es conocido por los famosos papiros de las Revenue
     laws, hallados en el Fayum: es un rollo largo que ofrece la memoria de las cargas del co­
     bro de diversas tasas establecidas por la oficina del dioketes. (La descripción que sigue es­
     tá esbozada a partir de los trabajos de Cl. Préaux.)
        15.  El préstamo de semillas existía también en la tierra privada.
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