Page 549 - Mahabharata
P. 549

7. Drona                                                                                 529


               sido disparada por un arco. Krishna le había agarrado fuertemente de su mano derecha
               e iban viajando juntos por el espacio. Se dirigían hacia el norte, pasando por muchos

               lugares hermosos. Vio la gran montaña llamada Mandara y parecía que se iban elevando
               más y más hasta que al fin llegaron a la cumbre de la montaña de nieve plateada. Allí
               vieron al gran Señor Sankara. Brillaba como mil soles juntos e iluminaba toda la montaña
               con su fulgor. Cayeron a sus pies y le adoraron. Sankara estaba complacido con su
               adoración y dijo a Arjuna:
                   —Dime, ¿cuál es tu deseo? Te lo otorgaré. Arjuna dijo:
                   —Quiero el famoso Pasupata.
                   Mientras estaba diciendo esto Arjuna miró al señor y vio allí las ofrendas que le había
               hecho a Krishna aquella noche. Sankara dijo:

                   » —Hay un lago de néctar en el que he depositado mi propio arco y la flecha con la
               que destruí a los Asuras. Puedes ir allí y cogerla.
                   Algunos de los muchos sirvientes de Sankara les acompañaron al lago de néctar.
               Allí en el lago, vieron una serpiente que tenía aspecto terrorífico, y mirando más de
               cerca vieron a otra que estaba escupiendo fuego y tenía mil cabezas. Entonces Arjuna y
               Krishna comenzaron a cantar los himnos del Maharudra y las serpientes cambiaron sus
               formas y se convirtieron en un arco y en una flecha. Arjuna y Krishna cogieron aquellas
               armas en sus manos con gran reverencia y fueron hacia Sankara.
                   Sankara les sonrió y de repente surgió de su cuerpo un bramachari que tenía ojos
               rojos y pelo negro azulado. Tenía una mirada fiera y cogió la flecha y el arco. Arjuna
               observó el modo en que lo hizo y aprendió de él el arte de tensar el arco y fijarle la flecha.
               Luego Arjuna oyó a Sankara recitar la sagrada invocación del pasupata. El bramachari
               arrojó desde allí el arco y la flecha al lago. Arjuna recordó entonces el duelo que mantuvo
               con Sankara en la montaña Indrakila. Se le había otorgado ver al señor con su consorte
               Parvati y se dio cuenta de que estaban en la presencia de ese mismo Sankara.

                   Se postraron de nuevo a sus sagrados pies y él les sonrió. Krishna y Arjuna volvieron
               a su campamento con gran regocijo en sus corazones. Este fue el extraño sueño de
               Arjuna.

                                                        Capítulo XIII
                                        AMANECE EL DECIMOCUARTO DÍA


                    MANECIÓ el decimocuarto día de la gran guerra. Era el cuarto día del mandato de
               A Drona. Yudhisthira se había levantado temprano por la mañana y ya había acabado
               su adoración matutina. Krishna fue a su tienda y detrás de él vinieron todos los héroes
               pandavas. Yudhisthira le preguntó a Krishna:
                   —¿Pasaste buena noche? Krishna respondió sonriendo:
   544   545   546   547   548   549   550   551   552   553   554