Page 635 - Mahabharata
P. 635

8. Karna                                                                                 615



                                                        Capítulo IV
                                        SALYA CONDUCTOR DE RADHEYA


                    MANECIÓ el decimoséptimo día de la guerra. Por la mañana temprano Duryodhana
               A fue hacia Salya y le dijo:
                   —He venido a ti con una petición; me postro a tus pies y te pido que me la concedas.
               Quiero que me hagas un gran favor; hoy Radheya se va a enfrentar con Arjuna en la
               batalla y teniendo un conductor como Krishna, Arjuna podrá ganar fácilmente. Es por
               eso que te pido muy humildemente que seas el conductor de mi querido amigo Radheya.
               No hay nadie como tú para manejar las riendas de los caballos de Radheya. Tú eres
               la única persona que puede hacerlo, debes ayudarme a superar esta situación critica.
               Radheya es muy superior a Arjuna, pero por esta desventaja no podrá matarle. Fíjate en
               mi ejército, al principio era enorme y ahora ha disminuido de tamaño igual que un río
               durante los meses de verano. Tenía a muchos grandes héroes luchando por mí, pero la
               mayoría de ellos han muerto: murieron para que yo pudiera vivir. No sé cómo escaparé
               al pecado de haber dejado morir a tantos de ellos, pero eso es algo que no me preocupa
               ahora. En este ejército sólo quedan unos pocos y tú eres el más grande de todos ellos. Tú
               eres la única persona que me puede ayudar a ganar la guerra. Radheya está seguro de
               que matará a Arjuna si te tiene a ti de conductor. Tú estás tan interesado por mi bienestar
               como Radheya, es por ello que debes ayudarme. Radheya no puede ser vencido ni por
               los dioses ¿por qué habría de preocuparme de este mortal, Arjuna? Por favor, acepta mi
               proposición. Salya estaba muy enfadado con Duryodhana. Le dijo:

                   —Duryodhana, me estás insultando, no tienes derecho a pedirme esto. Movido por
               tu afecto hacia Radheya le estás alabando demasiado. Le estás haciendo parecer más
               grande de lo que es en realidad; tus ojos amorosos están aumentando su grandeza; estás
               tratando de que yo, un kshatrya, preste servicios de sutaputra a un sutaputra. ¿Qué
               te ocurre, Duryodhana?. Me estás pidiendo que haga lo imposible. Los sutas son sólo
               sirvientes en la corte de un rey. Su labor es coger en sus manos el látigo y conducir los
               carros de los reyes. Yo soy un gran rey, he recibido el baño de la coronación y llevo una
               corona. Soy un maharathika, he luchado en muchas grandes batallas y nunca he sido
               vencido y ahora me pides que le haga servicios menores a un inferior, a un sutaputra
               ¿Cómo puede un kshatrya que ha sido consagrado rey, ser el conductor de un hombre de
               baja casta? Hablas como si Radheya fuera superior a mí y él no es ni siquiera igual que yo;
               puedo matar a ese hombre fácilmente. Me estás tratando de hacer esto deliberadamente.
               Fíjate en mi arco y mira estas flechas. Fíjate en mi carro y en mis hermosos caballos,
               puedo luchar con Indra y vencerle en un combate singular. Hoy has insultado a un gran
               guerrero. Puedo luchar con Radheya, Arjuna y Krishna juntos y ganarles. No me agradas
               tú ni tus palabras; me has insultado. Volveré a mi reino, no mereces el afecto que te tenía.
   630   631   632   633   634   635   636   637   638   639   640