Page 53 - Auge y caída del antiguo Egipto
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     ciudad de los muertos (por donde el sol se ponía). Asimismo, se beneficiaba de
               la extensa red de pistas que atravesaban el desierto al otro lado de las colinas de
               la  orilla  occidental.  El  control  de  aquellas  vías  de  comunicación  terrestres,
               intensamente  disputado,  confería  una  importante  ventaja  estratégica,  y
               desempeñaría un papel decisivo en muchos momentos importantes de la historia
               egipcia. Además, permitían a Tebas regular el acceso a Nubia por el norte.
                  Cuando el Nilo entra en la gran «curva de Qina» sus aguas fluyen en dirección
               este, situándose en la posición más cercana al mar Rojo de todo su curso. La
               orilla oriental era, pues, el punto de partida evidente para las expediciones a las
               colinas del mar Rojo —con sus minas de oro y canteras de piedra—, y, más allá,
               hasta  las  costas  del  propio  mar.  A  lo  largo  de  toda  la  época  faraónica,  los
               egipcios enviaron expediciones comerciales a la distante y legendaria tierra de
               Punt (actual costa de Sudán y Eritrea), que zarparon desde los puertos del mar
               Rojo. En los períodos ptolemaico y romano, el mar Rojo ofrecía la ruta marítima
               más rápida hacia la India, mientras que los desiertos del oeste de la curva de
               Qina eran un hervidero de actividad comercial y militar.
                  Siguiendo hacia el norte, una vez pasada la curva de Qina, el valle del Nilo
               cambia de nuevo de carácter y se vuelve mucho más ancho, y solo en la lejanía
               se  aprecian  los  riscos  erosionados  durante  años.  Irónicamente,  aunque  esta  es
               una de las partes del país más productivas desde el punto de vista agrario, en
               general  el  norte  del  Alto  Egipto  siempre  estuvo  algo  atrasado,  debido  a  su
               relativo  aislamiento  de  los  principales  centros  del  poder  político.  Una  notable
               excepción  fue  la  prominencia  de  Cheni  durante  el  período  prehistórico  y  las
               primeras dinastías, probablemente fruto de su control de la ruta más corta desde
               el Nilo hasta los oasis. En períodos posteriores, la gran antigüedad de Abedyu
               como cementerio real le otorgó una gran importancia religiosa, convirtiéndolo en
               el principal lugar de peregrinación de todo Egipto, un estatus que conservaría a
               lo largo de toda la época faraónica. En la guerra civil que siguió al colapso del
               Estado del Imperio Antiguo, Abedyu fue una pieza clave, y la región circundante
               sería disputada muchas veces en los conflictos periódicos que estallaron entre los





