Page 121 - Lara Peinado, Federico - Los etruscos. Pórtico de la historia de Roma
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en opinión de M. Pallottino, parangonable a la  Tomba delle Iscrizioni de Caere, antes
       citada, o a la Tomba degli Scudi de Tarquinia, también recordada. La tumba de Vulci, a
       partir de la epigrafía de sus paredes y de sus lastras, ha facilitado noticia de al menos 23
       personajes (17 etruscos y 6 latinos). El nombre que más predomina es el de Pruslnas,
       seguido por el de Mura,  familias titulares de la misma. En época romana, la  Tomba
       delle Iscrizioni pasó a manos de una familia Sempronia. En 1965 fue localizada, intac­
       ta, en la necrópolis de la Osteria, la Tomba del Cano di bronzo, del siglo vil a.C., con
       un rico ajuar funerario, sobresaliendo los restos de un carro de «parada».
           Un puesto avanzado sobre el Fiora lo constituyó el enclave de raíces protovilla-
       novianas de Poggio Buco con su importante necrópolis y su área urbana, así como
       las dos tumbas de Pitigliano, del siglo vi a.C.


       En Vetulonia

          Vetulonia, por su parte, contó con diferentes y grandiosas necrópolis a las que ya
       se aludió con anterioridad (Poggio alia Guardia, Poggio delle Birbe, Colle Baroncio,
       Costa delle Dupiane). Las que corresponden a la fase villanoviana alcanzan casi la ci­
       fra de dos mil tumbas, cuyos ajuares han facilitado osarios bicónicos, urnas en forma
       de cabaña, de planta circular y elíptica. A finales del siglo v iii a.C. se pueden fechar
       las tumbas de pozo y de fosa de los circoli intenotti, sustituidas poco después por las de
       fosa, revestidas con lastras de piedra, propias de los circoli continui, también conocidos
       como circoli dipietre biancbe. De estos últimos son notables el Circolo dei Lebeti, que fa­
       cilitó lebetes de bronce; el  Circolo del Tridente,  con numeroso material metálico, sobre
       todo cadenas, y la Tomba delLittore,  en la que se halló un objeto de hierro, muy oxi­
       dado, pero evaluado por su descubridor I. Falchi como una bipennis con fasces. Tum­
       bas particularmente ricas, del siglo vil a.C., son las del  Circolo deiLeoncini d’Argento,
       y la Tomba delDuce, que facilitaron notables ajuares. En esta última, entre sus riquísi­
       mos materiales, se halló una barquita (23 cm de longitud) de bronce, con decoración
       plástica, traída de Cerdeña, que testimonia el grado de distinción de sus propietarios
       (cuatro deposiciones de incineración).
          La más significativa tumba, aunque ya de los últimos momentos de la fase orien­
       talizante de Vetulonia, es el  Tumulo della Pietrera, de cerca de 60 m de diámetro, con
       colina  artificial e  interior a base  de  dos  niveles  superpuestos  con accesos  indepen­
       dientes, cellae laterales y cámaras sepulcrales. De éstas, la más antigua, de planta circu­
       lar, a modo de thólos, cubierta con falsa cúpula apoyada sobre pilastra central, facili­
       tó un conjunto de ocho antiquísimas esculturas etruscas, evaluadas como las prime­
       ras que se labraron en piedra. Próximas a este túmulo se hallan la Tomba della Fibula
       d’Oro —otro ejemplo de tumba de cámara con pilastra central— y ya, mucho más
       alejada, la conocida como delDiavolino II, gran túmulo con tambor y cámara sepul­
       cral de planta cuadrada. La Tomba del Diavolino I  faz desmontada y hoy puede visitar­
       se en el Jardín del Museo Arqueológico de Florencia.


       En Populonia

          Populonia dispuso sus necrópolis y tumbas no lejos de la costa, como se señaló
       al hablar de tal ciudad. Además de una necrópolis protovillanoviana, Populonia con­
       tó con otras de tiempos villanovianos, como las del Podere San Cerbone, del Caso-

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