Page 370 - Lara Peinado, Federico - Los etruscos. Pórtico de la historia de Roma

A partir del siglo iv a.C., su iconografía fue variando, pues pasó a ser representada
semidesnuda, a imagen de Turan (Afrodita), cuyas funciones como diosa del amor com­
partió en parte, asumiendo significados de las divinidades griegas Ilitía y Leucóthea, an­
tes citadas. Uni acabó siendo la protectora de la vida femenina en sentido amplio.

c) Menrva

La titular de las ciudades amuralladas y nodriza de distintos dioses, así como curan­
dera y mántica, fue Menrva., llamada primeramente Menarva y mucho más tarde Merva
y también Mera. Su culto, partiendo de Etruria, se extendió a partir del siglo vi a.C. por
toda Italia, en donde tuvo numerosos templos, sobresaliendo por su importancia los del
Portonaccio, en Veyes, y el de Santa Mari-
nella, en el territorio de Caere. Se supone
que también hubo de tener un notable
santuario en Arezzo, dado que en dicha
localidad se halló una interesante imagen
broncínea de tal diosa.
De Menrva han llegado numerosas
estatuas votivas, localizadas en depósitos
cultuales de Perugia, Caere y Arezzo, así
como lastras de terracota pintada, en
donde aparece ayudando a diferentes hé­
roes (en especial a Perseo y a Heracles), y
representaciones plásticas (Pyrgi, grupo
de Sant’Omobono de Roma).
Según la mitología etrusca, Menrva
poseía en propiedad uno de los rayos del
firmamento (manubiae minervalis) con el
cual se la representó en algunas ocasio­
nes. Cuando se la rodeó de los atributos
de la griega Atenea, se la figuró con la
égida drapeada y con casco, blandiendo
lanza y armada con escudo redondo.
Asimismo, se la dotó, en algunas ocasio­
nes, de alas (relieve de Pyrgi, por ejem­
plo), en clara alusión a la rapidez de la
diosa y de acuerdo con modelos jonios.
En los espejos (caso de uno de Bolonia)
se la representa naciendo de la cabeza de
Tinia con la ayuda de otras diosas y dio­
ses (Thanr, Ethausva, Thalna, Sethlans).
En Etruria tuvo connotaciones de diosa
ctónica (altares de sacrificios), así como
funciones oraculares (sors oraculi hallada
en Santa Marinella). Asimismo, se la aso­
ció al mundo de la infancia (kourotróphos),
Menrva combatiente. (Museo del Louvre, París. ocupándose de los misteriosos niños,

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