Page 26 - Guerra de las Galias [Colección Gredos Bilingüe] I-II-III
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VIII. (1) Interea ea legione* quam secum habebat
militibusque qui ex provincia convenerant, a lacu Le
manno, qui in flumen Rhodanum influit, ad montem
luram, qui fines Sequanorum ab Helvetiis dividit, milia
passuum decem novem murum in altitudinem pedum
sedecim fossamque perducit. (2) Eo opere perfecto,
praesidia* disponit, castella communit, quo facilius, si,
se invito, transire conarentur, prohibere possit. (3) Ubi
ea dies quam constituerat cum legatis venit et legati*
ad eum reverterunt, negat se, more et exemplo populi
Romani, posse iter ulli per provinciam dare, et, si vim
facere conentur, prohibiturum ostendit. (4) Helvetii, ea
spe deiecti, navibus iunctis ratibusquè compluribus fac
tis, alii vadis Rhodani, qua minima altitudo fluminis
erat, non numquám interdiu, saepius noctu, si perrum
pere possent conati, operis munitione et militum con
cursu et telis repulsi, hoc conatu destiterunt.
IX. (1) Relinquebatur una per Sequanos via, qua,
Sequanis invitis, propter angustias ire non poterant.
VIII. (1) Mientras tanto, con la legión que tenía consigo y con los
soldados que se habían reunido de la Provincia, levanta un muro de diez
y nueve mil pasos de largo por diez y seis pies de alto, con su correspon
diente foso, desde el lago Leman, que vierte sus aguas en el Ródano,
hasta el monte Jura, que separa las tierras de los secuanos de las de los
helvecios. (2) Acabada esta construcción, puso guardias de trecho en tre
cho y fortificó los castilletes a fin de poder rechazar más fácilmente a los
enemigos, si intentaban pasar contra su voluntad. (3) Llegado el día que
había convenido con los legados y habiéndose vuelto a presentar éstos,
díjoles que, según costumbre y ejemplo del pueblo romano, él no podía
dar paso a nadie por la Provincia, y que, si trataban de forzarlo, estaba
dispuesto a impedirlo. (4) Los helvecios, perdida esta esperanza, inten
taron abrirse paso, unos en naves que juntaron y en muchas balsas. que
hicieron, otros por los vados del Ródano, por donde menos profundo
era el río, a veces de día y más frecuentemente de noche; pero, fraca
sando siempre ante la solidez de la construcción y ante la vigorosa de
fensa de los soldados, cejaron en su empeño.
IX. (1) Quedábales sólo el camino a través de los secuanos; mas, sin
el consentimiento de éstos, no podían emprenderlo, a causa de su angos-
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