Page 101 - El Misterio de Belicena Villca
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se afirmarían en el Norte de España, en las regiones célticas. Desde el
monasterio de Dumio, vecino a Braga, en la Lucitanía, y otros en Bierzo y en el
extremo de la cordillera cantabro asturiana que se denomina Picos de Europa, los
Golen emprenderían infinidad de incursiones en la Bética con el fin de destruir a
la Casa de Tharsis y robar la Espada Sabia. Toda una guerra secreta se libró
desde el siglo VIII, en la que los “monjes misioneros” Golen intentaban
aproximarse a la Villa de Turdes y los Señores de Tharsis los hacían ejecutar sin
piedad. Pero, por cada Golen benedictino que desaparecía sin dejar rastros o
aparecía asesinado en un camino por manos desconocidas, concurrían dos en su
reemplazo, obligando a la Casa de Tharsis a mantener, como antaño, un
permanente estado de alerta. Expertos en magia negra, y maestros en toda clase
de Ciencias, emplearían cuanto sabían para localizar la Caverna Secreta, mas
siempre fracasarían. Al final, solicitarían el auxilio de Bera y Birsa, como se verá
más adelante.
Es evidente que la inserción de los Golen en la Iglesia Católica no
constituye un motivo suficiente para descalificarla completamente. La razón es
que los Golen se introducen como “Sociedad Secreta” dentro de la Iglesia y,
aunque sus intrigas comprometen en más de una ocasión a la Iglesia toda, sus
planes jamás son declarados públicamente ni asumidos oficialmente por ésta.
Por el contrario, en muchas otras ocasiones personalidades verdaderamente
espirituales, auténticos kristianos, han brillado en su seno. Conviene considerar
entonces, a pesar de que tal distinción no siempre sea fácil de determinar, como
si existiesen dos Iglesias superpuestas: una, contra la que lucharon los Señores
de Tharsis, es la Iglesia Golen; así la denominaré en otras partes y su definición
irá surgiendo de la historia; otra es la Iglesia de Kristos, o Iglesia a secas, a la
que pertenecieron los Señores de Tharsis y el Circulus Domini Canis, y a la que
pertenecen muchos de los que están por el Espíritu y contra las Potencias de la
Materia, por Kristos Luz y contra Jehová Satanás. Una es la Iglesia de la Traición
al Espíritu del Hombre y otra es la Iglesia de la Liberación del Espíritu del
Hombre, una es la Iglesia del Demonio del Alma Inmortal y otra es la Iglesia del
Dios del Espíritu Eterno.
Decimosexto Día
Sobre el Papa benedictino Gregorio I, el creador del “canto gregoriano”,
caben agregar dos cosas. Una es destacar que la presión ejercida sobre San
Leandro para que influyese en Recaredo y consiguiese el ingreso masivo de los
Golen en España sólo dio por resultado que en los monasterios ya existentes se
adoptase la Regula Monachorum. Y la otra es notar que su decisión, tomada en
combinación con San Columbano Golen, de enviar en el año 596 al monje San
Agustín y treinta y nueve benedictinos a Gran Bretaña, obedecía a la necesidad
de reemplazar provisoriamente a los irlandeses en la tarea evangelizadora.
Aquella partida llevaba el cometido de evangelizar a los anglos y a los sajones
que no hacía mucho habían conquistado la isla: según San Columbano y otros
Golen, estos pueblos (de Sangre Muy Pura) manifestaban natural predisposición
contra los celtas y especialmente contra los irlandeses; sólo respetarían a otros
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