Page 136 - Murray, Gilbert. - Grecia Clásica y Mundo Moderno [1962]
P. 136

140           GRECIA  CLÁSICA  Y  MUNDO  MODERNO


      la  mano  de  una  princesa  priamida,  quizá  Casandra.  En  un  fragmento 4
      se  dice  algo  de  matrimonio  (γάμψ  νιν  εικατ).  Cabe  pensar  que  Hécuba
      se  enfureciera  ante  la  idea  de  que  de  la  herencia  de  sus  hijos  parti­
      cipara  un  esclavo  y  de  la  degradación  que  para  su  hija  suponían  los
      abrazos  de  éste.  Dudo,  sin  embargo,  de  que  se  empeñara,  como  pre-
      tende  Snell,  en  dar  muerte  al  pastor  con  sus  propias  manos,  sobre
      todo  en  presencia  de  Deífobo5.  Cronert  supone  que  hay  un  error
      en  el  papiro,  pero  toda  la  dificultad  parece  deberse  a  una  falsa  con­
      jetura  [τη]ιδε  χειρί  δει  θανειν,  frase  en  que  τ  y  η  son  hipotéticas.
      Quizá  fuera  [σή]ι  δέ,  [πιστή]ι  δε,  o  algo  parecido.  En  tal  caso,  re­
      sulta  más  natural  la  respuesta  de  Deífobo  que  dice  “ No  es  invulne­
      rable"  o  bien  “ No  será  por  falta  de  heridas...” 6.  Sigue  una  escena
      en  que  Héctor  vuelve  a  adoptar  una  actitud  generosa.  Está  dispuesto
      a  aceptar  como  amigo  a  un  hombre  tan  valiente  como  el  boyero,  y
      apostrofa  a  Deífobo  por  tomar  tan  mal  su  derrota.  Al  final  aparecen
      unos  medios  versos  de  Hécuba,  que  cabe  completar  de  distintas
      maneras ;
                           οδτος  μεν  αεί  .  .  .
                           ρέξεις  δ’  á  λυποόμεσθα
                           κτανο'ντες  ανδρα  δοΰλον

         Estos  versos  pueden  significar  que  Hécuba  ha  sido  convencida
      por  Héctor.  “ Héctor  es  siempre  prudente;  tú,  Deífobo,  te  dispones
      a  hacer  algo  que  será  causa  de  dolores  para  nosotros  cuando  se
      demuestre  que  hemos  asesinado  a  un  esclavo.”  O  bien;  "Héctor  es
      siempre  generoso,  pero  de  todos  modos  cometerás  el  hecho  quitando
      la  causa  de  nuestro  dolor.  Matando  a  un  esclavo  nosotros...”  Des­
      pués  de  pensarlo,  esta  última  interpretación  me  parece  la  más  natural.
         Poco  después  vemos  que  Alejandro  entra  y  con  la  espada  sacada
      busca  refugio  en  el  altar ;  el  altar  es  el  de  Zeus  Herkeios,  el  íntimo
      Protector  de  la  Familia,  donde  luego  fue  muerto  Príamo.

         4  49  Snell.  Cf.  59  N.
         5  Snell  pretende  que  Hécuba  trate  de  matar  con  sus  propias  manos  a  Paris
      leyendo  τ$δδ  χειρί  δει  θανεΐν,  y  propone  que  el  reconocimiento  se  haga  me­
      diante  un  Gerón  o  Senex  del  tipo  bien  conocido  (cf.  Sóf.  Electra  y  Ed.  Rey)
      Euríp.  Electra),  al  que  se  había  dado  la  orden  de  matar  al  niño,  pero  no  la
      había  cumplido.  De  esto  no  hay  prueba  especial  alguna  y,  a  mi  entender,  «)
      resultado  sería  menos  eficaz.
         6  00  ¡«¡V άτρωτος  γ’  Ιστίν (είσιν? Cr.)  εις  'Άιδου  δόμους.
   131   132   133   134   135   136   137   138   139   140   141