Page 78 - Murray, Gilbert. - Grecia Clásica y Mundo Moderno [1962]
P. 78
82 GRECIA CLÁSICA Y MUNDO MODERNO
Pero los fragmentos son bastante numerosos y su estudio queda re
compensado con creces.
Hasta aquí hemos venido considerando formas de la cuestiÓB
“ ¿Qué es lo real?” o bien “ ¿De qué está compuesto el mundo?”
Éste fue el problema de que partió la filosofía griega, y el comienzo
fue brillante. Nos es dado ver cómo una forma de respuesta fue
conduciendo a otra. Pero la decepción no tardó en producirse, y la
principal corriente de la filosofía tomó otro rumbo. Ya avanzado el
siglo V, la gente decía, con Sócrates y la mayoría de los sofistas, que
tales investigaciones sobre la naturaleza, el mundo y las estrellas erais
estériles. Esas cosas — decían— son incognoscibles ! más vale ocuparse
de problemas más prácticos y más dóciles, como, por ejemplo, la
ética y la política y la naturaleza del alma; lo cual es justamente lo
contrario de lo que diría un moderno. Para nosotros son precisamente
la ética, la política y la naturaleza del alma las que plantean los pro
blemas de imposible respuesta; la ciencia física y la astronomía, en
cambio, han conseguido ya un enorme cúmulo de resultados concre-
tos y prácticamente ciertos. La explicación de la paradoja es bastante
evidente. Los griegos no podían llegar muy lejos en física o, de
todos modos, en los vastos problemas que quisieron abordar sin dis
poner de todo un conjunto de instrumentos científicos para la obser
vación exacta, la medición y la experimentación que, claro está, no
poseían. De aquí que después de la primera gran explosión de curio^
sidad y especulación sobre el mundo volvieran los filósofos del siglo v
a los estudios que dependían principalmente de la introspección, de
la capacidad de razonar y de la imaginación. El equilibrio lo resta
bleció hasta cierto punto Aristóteles.
Sócrates, según nos dicen, empezó estudiando física, como la llama
ríamos nosotros, y τα μετέωρα, cosas del firmamento, como astronomía ;
después, dándose cuenta de que no sabía nada y de que no podía
averiguar nada con certeza, pasó a una nueva forma de filosofía que
puede denominarse grosso modo análisis de la introspección. La gente
estaba empleando siempre términos como “ bien” y “mal” , “justo" t
“ injusto” , “ bello” y “ feo” ,“ saber” y “ pensar” ; ¿qué querían decir
en realidad con estas palabras, y qué realidad había detrás de ellas?
Es el paso de los juicios de hecho, que parecen inasequibles, a los
juicios de valor en función de lo humano, a los que quizá quepa
llegar. La cuestión fundamental ya no es "¿qué es el mundo?” ,